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Unidad de Juan 17 y el remanente mesiánico de Israel



Hace algunos años, en oración, percibí la siguiente revelación. Se las presento para su discernimiento:


Ha llegado el tiempo para que el remanente mesiánico de Israel tome un lugar de liderazgo en el Cuerpo del Mesías a nivel mundial. En “olas” previas del Espíritu Santo, diferentes grupos locales en varios lugares en el mundo han tomado el liderazgo. Cada vez hubo un tema principal de revelación, el cual dirigió al Cuerpo del Mesías por un tiempo.


¿Cuál será ahora la principal revelación del remanente en Israel para bendecir al resto del Cuerpo? La respuesta es: el llamado a la unidad en Juan 17. Esto podría ser una sorpresa para muchos aquí en Israel. No esperábamos que la unidad en la iglesia internacional fuera un mensaje central para nosotros.


La última parte, cronológicamente, del Cuerpo del Mesías a nivel mundial a ser restaurada es el remanente mesiánico de Israel. Igualmente, la restauración final del Cuerpo en general es nuestra unidad de acuerdo con la oración en Juan 17. Esta unidad incluye la unión divina con Dios, la glorificación por el Espíritu Santo, y la evangelización final del mundo.


La unidad en Juan 17 esta conectada a la parábola del olivo en Romanos 11. Las diferentes partes de la iglesia internacional están representadas como ramas de diferentes árboles que se injertan en un solo olivo. El injerto causa unidad porque todas las ramas se injertan al mismo árbol. (Escribí sobre esta conexión de Juan 17/Romanos 11 en el libro “The Five Streams” [Los Cinco Arroyos] hace más de 20 años).


[Nota: La vid en Juan 15 habla de una conexión espiritual personal, mientras que el olivo de Romanos 11 habla de una conexión histórica nacional. Juntos hablan de la unidad con Yeshua, Israel y la iglesia.]


Para que esta unidad se lleve a cabo, nosotros, como el remanente mesiánico de Israel necesitamos “adoptar” al Cuerpo global, la iglesia internacional. Dios le dijo a Abraham que el sería el “padre de muchas naciones” (Génesis 17). ¿Cómo se llama cuando una familia toma a un niño que no es de ellos biológicamente? Adopción.


El pacto de Dios con Abraham fue que él adoptaría los hijos espirituales de todas las naciones quienes vinieran a una fe similar a la suya, y ser una bendición para ellos. Nosotros como el remanente mesiánico somos llamados a caminar en los pasos de Abraham “adoptando” a la iglesia internacional y siendo una bendición para todos nuestros hermanos y hermanas espirituales que creen en nuestro Mesías Yeshua.


Para “adoptar” otras naciones necesitamos engrandecer nuestros corazones (2 Corintios 6:12; 7:2), tomar la cruz, morir al orgullo racial, sanar del rechazo, tener fe para dar a otros, entender que nuestro llamado es servir a las naciones, y apoyar a la iglesia internacional, el verdadero Cuerpo del Mesías.


La iglesia internacional puede ser vista como una familia de familias. El remanente de Israel esta supuesto a ser el hermano mayor de la familia. El rol del hermano mayor, o del primogénito, es el de unir a la familia extendida. A medida que nosotros, los judíos mesiánicos, tomamos el llamado de Juan 17 a la unidad, también tomamos nuestro propio llamado como el remanente de Romanos 11.


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